“Ray, he estado escuchando los podcasts de Living Waters y me parece ver que su forma de predicar es tramposa y deshonesta. Creo que fue Kirk quien llevaba a alguien a través de la “prueba de la buena persona” y si la persona contestaba algo de una forma que él no quería escuchar, había siempre un plan de refuerzo para probar que la persona estaba mal. No es una prueba, es una trampa, una condenación… La forma en que aparece tu amigo es deshonesta.”

Amigo ateo le haz dado justamente al clavo. Es ciertamente “una condenación”, sin embargo, no es deshonesta. Míralo de la siguiente forma. Tú eres un criminal que no quiere dejar su malvado estilo de vida, porque no piensas que es “malo”. Consideras tu anarquía como un emocionante estilo de vida. Además, nunca te ha atrapado la policía. Ni una sola vez.

Yo soy un oficial de policía que tiene la difícil tarea de hablarte sobre una especial amnistía de corto plazo que ha sido ofrecida por el Jefe de la Policía. Tienes un determinado tiempo para bajar tus armas y cambiar tu estilo de vida. Una vez que la puerta de la amnistía se cierre, ya no habrá misericordia, especialmente sabiendo que haz ignorado el ofrecimiento de amnistía. No me queda otra alternativa, más que mostrarte que ya has sido condenado sin ninguna opción de escape, y que sería muy insensato el ignorar el ofrecimiento de amnistía.

Como cristiano, la única (y no muy agradable) forma de convencerte del terrible peligro que corres es el mostrarte la seriedad de tus crímenes contra Dios, que tienes “ojos llenos de adulterio” y que los labios que mienten son una abominación para Él. Esto se hace dándote un recorrido de la Ley moral (los Diez Mandamientos). Tienes que estar convencido que eres un enemigo de Dios… que lo odias “sin razón”, al punto de hasta negar tontamente su existencia misma.

Si no te rindes ante Jesucristo y aceptas la increíble oferta de amnistía que Dios da (escape del Infierno y vida eterna), caerás bajo la bien merecida condenación de Su Ley. La Biblia dice que en este momento ya estás condenado (ver Juan 3:17-18, 36)

Hay tres formas de saber si lo que digo es la verdad:

  1. El preciso segundo que pases a la eternidad te darás cuenta lo insensato que has sido al haber ignorado al Salvador, pues verás que es demasiado tarde para gritar: “Dios ayúdame!”
  2. En la Segunda Venida de Jesucristo, cuando los cielos se vayan y Él venga en fuego “Descargará su enojo con furor, y su reprensión con llamas de fuego.”
  3. Cuando te arrepientas de tus pecados y pongas tu fe en Jesús, obedece el evangelio y Dios mismo se te revelará (ver Juan 14:21). De esta manera  sabrás la verdad y la verdad te hará libre. El evangelio que tengo el privilegio de predicar, es apoyado por el poder de Dios. La filosofía atea que tú tienes, no tiene un fundamento sólido en que apoyarse.
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